
#3 Finales felices
Hay momentos en la vida que uno siempre recordará. Todos y cada uno de vosotros sabéis de lo que hablo. No voy a extenderme en citarlos. Hoy mi columna versa sobre esos momentos relacionándolos con el Lega y el cine, lo que llamaré 'finales felices'. Y es que son tan poco habituales que creo importante hacer una especial mención de ellos.
Nuestro amado club debido a una innumerable sucesión de problemas económicos, deportivos, sociales, institucionales e imponderables, ha vivido, a lo largo de los años, más momentos amargos que felices.Pero hoy no es ese día.
Hoy, sin que sirva de precedente hablaré de finales felices y entraremos en nuestro personal estadio de las emociones silbando la "marcha del coronel Bogey" de EL PUENTE SOBRE EL RÍO KWAI (David Lean. 1957) y nos detendremos en la descarga de adrenalina y felicidad que produce la voladura de dicho puente cuando el coronel Nicholson, magistralmente interpretado por Alec Guiness, cae sobre el detonador y manda el puente a freír puñetas.
Algo parecido sentí el domingo en Butarque cuando la bota de Sastre conectó nítidamente con el balón y se introdujo en la portería del Albacete. Minuto 93. Victoria en el último segundo.
El estallido de felicidad que se produjo después fue inmenso y lo vivimos todos juntos, afición y equipo. Juntos.
Me dolían las manos de aplaudir pero no podía parar. Me sentí feliz. Feliz. Feliz de haber estado presente, de haber formado parte de algo que es más grande que uno mismo.
Inmediatamente me vino a la cabeza el final de CASABLANCA (Michael Curtiz. 1942),cuando Bogart suelta aquello de:"Loui, presiento que este es el comienzo de una gran temporada".
Por mi memoria comenzaron a pasar goles del Lega, un montaje parecido al final de CINEMA PARADISO (Giuseppe Tornatore. 1989) pero, en lugar de besos, yo veía goles. Cada uno tendrá presente en su memoria los suyos. Muchos aún tendréis fresca en la retina nuestra particular versión de EVASIÓN O VICTORIA (John Houston. 1981), que el Leganes rodó en Hospitalet no hace mucho. Stallone parándose un penalti y Pele marcando de chilena a lo Carlos Álvarez y no al revés.Apoteosis.
Por alguna razón yo recuerdo mucho un gol de Barbarín al Villareal en la temporada 99-00. No sabría explicaros porque pero es así. Ganamos 1-0 en Butarque ese día y mi cerebro lo grabo en HD para siempre. Misterios del cerebro.Ademas con Julián Ronda en la plantilla. DEP.
Nuestro club se cimenta sobre la humildad y el trabajo duro. Es por ello que estamos acostumbrados a sufrir para alcanzar nuestros objetivos. Os menciono algunas películas que creo que ejemplifican este oscuro trabajo y sacrificio: AMERICAN FLYER (John Badham. 1985), BREAKING AWAY (Peter Yates. 1979) y UNBROKEN (A. Jolie. 2014). Las menciono con sus títulos originales para picaros un poco la curiosidad y que veáis de lo que hablo. Además, así hacéis algo de deberes en casa. El Lega es esfuerzo para conseguir objetivos. ¿Recordáis?
El camino de nuestro equipo para alcanzar estos momentos de felicidad suele ser muy duro. Tanto como cuando Chuck Yaeger, interpretado por el correcto Sam Sheppard en ELEGIDOS PARA LA GLORIA (Philip Kaufman. 1983), se juega la vida para romper la barrera del sonido con las costillas rotas. O en CADENA PERPETUA (Frank Darabont. 1994) cuando Tim Robins se tiene que arrastrar más de 1 kilómetro por la tubería de los retretes de la prisión para alcanzar la libertad. La victoria peleada sabe mejor.
El camino para llegar a Zihuatanejo ha sido un infierno que dura años, pero el esfuerzo ha valido la pena porque cuando llegas allí, te esperan tus amigos y hermanos, aficionados como tú del C.D.Leganes. Ese es el premio por no perder nunca la fe ni la esperanza.
Cuando, por una de esas escasas ocasiones experimentas la enorme alegría de un final feliz, como el domingo contra el Alba, ese día te vas a dormir con una sonrisa en los labios, como en el episodio final de MAD MEN. Se me puso la enigmática sonrisa de Don Drapper. Yo sabía algo que nadie más sabía y lo duro y difícil que es experimentar esa euforia desmedida siendo hincha del Lega.
Para Julián.